La salud sexual, reproductiva y no reproductiva también incluye la educación sexual, la prevención y el tratamiento de las enfermedades de transmisión sexual, el asesoramiento antes de la concepción y durante el embarazo, y el tratamiento de la infertilidad.

Desde la Universidad Hospital Italiano de Buenos Aires sostienen: “La planificación familiar constituye un elemento clave para el ejercicio pleno de los derechos a la salud sexual y reproductiva de la población. Es un componente fundamental de bienestar y libertad de las personas”.

Por otro lado, hablan de la anticoncepción y la salud sexual, es decir, la posibilidad de toda persona o pareja de decidir cuántos hijos tener y cada cuánto tenerlos, accediendo para ello a diferentes métodos de control de natalidad a costos razonables. Gracias a la tecnología, existen amplias opciones para que cada persona pueda elegir en función a sus costumbres, antecedentes de salud y preferencias.

Uno de los métodos más efectivos fueron los intrauterinos (conocido como DIU), que pueden ser de cobre u hormonal. También existen los tradicionales métodos de barrera como el preservativo.

¿Qué método se recomienda elegir?

Los especialistas dicen que no existe un anticonceptivo ideal, pero se puede encontrar el que mejor se adapte a la situación de cada mujer, con el menor número de efectos adversos y con la mayor eficacia posible.

Además, agregan: “hoy en día se hace mucho hincapié en los métodos de larga duración como el DIU de cobre/hormonal o implante, así como el uso del preservativo, ya que también previene la transmisión de ETS (enfermedades de transmisión sexual). Asimismo, las adolescentes suelen elegir las pastillas, que en bajas dosis pueden tomarse por largos periodos”

¿Qué sucede con los periodos lactantes?

Los médicos explicaron qué durante la lactancia, se puede colocar un DIU o utilizar métodos hormonales sin estrógenos. En este caso, se utilizan pastillas diseñadas para esta etapa. Ambos métodos son muy útiles para “espaciar” un embarazo de otro.