El fundador y realizador audiovisual Ariel Ogando, destacó que en cada edición este Festival busca mostrar un panorama de lo que está sucediendo con las producciones tanto en el país como en Latinoamérica. “Es como una fotografía”, afirmó, adelantando que en esta edición se podrán ver distintos géneros y formatos, tanto de documental, experimental, animación y ficción, de producciones que ya están circulando en otros festivales y muestras.

Ogando subrayó que se podrá acceder de manera libre y gratuita a estos materiales. Y señaló que consideran “súper interesante esta realización de manera híbrida, que sea presencial y online”. Esta modalidad permite que “compañeros y compañeras y gente interesada del audiovisual que está en otras provincias pueda acceder a Jujuy Cortos”.

Por otro lado, sostuvo que hay quienes ven al festival como “un espacio de encuentro y resistencia”.

Este año solo se hará una jornada presencial debido a la “difícil situación» que está atravesando el sector audiovisual. «No queríamos dejar de hacer un encuentro presencial para que compañeros y compañeras tengan la posibilidad de acercarse a la sala y compartir de manera colectiva el placer de ver cine”, aseguró el realizador. Afirmó que es un contexto muy difícil para este sector de la cultura en el país, como lo  es para todos los argentinos dado que las “políticas públicas implementadas a nivel nacional son tremendas, con un impacto durísimo”. 

En este contexto muy difícil para el cine argentino, los hacedores de Jujuy Cortos insistieron en que el Festival se convierta en una pantalla en defensa de la producción audiovisual nacional. La muestra, nacida en 2002, se consolidó como una de las propuestas de difusión del cortometraje más importantes del noroeste argentino.

El festival cuenta con el apoyo del Instituto de Artes Audiovisuales de Jujuy (IAAJ), la Secretaría de Cultura de la provincia de Jujuy, la plataforma Octubre TV, y el acompañamiento del Teatro Mitre, el Cinemóvil Jujuy, la Red Argentina de Cine Comunitario (RACC), la Red Argentina de Documentalistas (RAD) y la Red Argentina de Festivales y Muestras Audiovisuales (RAFMA), además de espacios y colectivos barriales y comunitarios locales.

“Contar nuestras propias historias”

Wayruro sostiene el concepto de la soberanía audiovisual, la posibilidad de “contar nuestras propias historias y poder emitir nuestros propios mensajes” desde las regiones y desde las provincias. Ogando dijo que el Festival adquiere una significación y una relevancia muy importantes, porque “frente a la retracción y a la imposibilidad de hacerse muchos festivales y muestras, nosotros, con muchísimo esfuerzo, con mucha militancia, con mucha pasión y amor, podemos hacer esta 23° edición” de manera ininterrumpida.

“También es plantar una banderita acá en el norte respecto a nuestra posibilidad de seguir contando historias”, expresó. En agosto se llevó a cabo con éxito un taller sobre “Microformatos y producción audiovisual”, y en septiembre, uno sobre “Iluminación y edición”, ambos con cupos completos. En lo que resta del año se desarrollarán los talleres de “Celumetrajes” y de “Producción audiovisual comunitaria”.

En referencia a la cultura Ogando dijo que no sólo se está sufriendo el desfinanciamiento sino también el “abandono prácticamente de políticas públicas vinculadas al audiovisual”. E insistió que en este marco Jujuy Cortos “es un espacio de resistencia, de lucha, de encuentro, y lo que pretende también es ser una trinchera, donde encontrarnos, reflexionar sobre lo que está pasando y plantear alternativas ante una realidad que es sumamente adversa”.

El realizador dijo que en las circunstancias actuales el sector enfrenta numerosos desafíos, porque al desfinanciamiento se suma la estigmatización por parte del gobierno nacional. En este contexto Wayruro Comunicación Popular enfatiza la importancia de la colaboración colectiva a través de vinculaciones como la Red Argentina de Documentalistas y la Red Argentina de Festivales, entre otras. Ogando manifestó que la lucha no se limita al sector audiovisual, sino que también incluye otras expresiones culturales como el teatro y la música.

Fuente: Página 12