Así, Jujuy se convirtió en la cuarta provincia en Argentina en implementar estos cobros tras aprobar la Ley 6.116. Si bien esta norma fue originalmente sancionada en 2019, no había sido reglamentada hasta ayer debido a un acuerdo de asistencia sanitaria recíproca firmado entre Argentina y Bolivia. Este acuerdo impactó directamente en la aplicación de la ley, posponiendo su puesta en práctica hasta ahora. El gobierno jujeño busca garantizar el acceso equitativo al sistema de salud a través de un marco de reciprocidad, especialmente con países vecinos como Bolivia. El cobro incluye consultas, operaciones e internaciones, pero exceptúa las emergencias que siguen siendo gratuitas.
Mendoza estableció su sistema de cobro a través de un decreto en agosto, con el objetivo de recuperar fondos y fortalecer el sistema de salud local. La medida especifica que los costos deben ser cubiertos por los propios pacientes extranjeros o sus seguros, y aplica a aquellos categorizados como residentes transitorios o precarios. Las autoridades provinciales afirmaron que esta política es parte de un esfuerzo más amplio para manejar el déficit en los servicios de salud públicos.
Santa Cruz siguió los pasos de Salta y Mendoza al implementar la medida desde abril pasado. Fue tomada en respuesta a un déficit económico significativo en el sistema de salud provincial. Las tarifas se ajustan según el tipo de atención y la duración de la internación y busca disuadir el uso no contributivo del sistema de salud por parte de extranjeros.
Provincias como Neuquén, Corrientes, Entre Ríos y Córdoba están evaluando o han iniciado proyectos de ley para lanzar políticas similares.
Russo explicó a Infobae en una nota anterior que identificó un importante “despilfarro de recursos” en el sistema de salud. Para optimizar la gestión y mejorar la eficiencia, se está trabajando en la redefinición de competencias con las provincias. En palabras del ministro: “Hoy el sistema de salud está quebrado y nosotros vinimos a refundarlo”.
Además, ya había destacado en ese mismo diálogo la importancia de las erogaciones del Estado en la asistencia a personas no residentes, las cuales consideró como parte del “despilfarro”. Puso como ejemplo las provincias que ya implementan este sistema y consideró que es el resultado de una transformación cultural y un esfuerzo por ordenar las finanzas provinciales.
El cobro de la atención a extranjeros que se está llevando a cabo en varias provincias, “me parece que es un cambio de época, que es un poco redefinir qué significa la salud pública”, dijo Russo anoche a La Nación+. El ministro consideró que esta medida a veces se vuelve una “charla incómoda para ser políticamente correcto, pero lo políticamente correcto es que la Argentina tiene una pobreza infantil por arriba del 60% de nuestros compatriotas y vamos a pelear por eso y estamos trabajando mucho con el resto de los ministerios en que sea la salud accesible y oportuna”.
Relató, además, que cuando conversa con los ministros de Salud de las provincias que ya comenzaron estos cobros le aseguran “que no es el objetivo que se vaya a llenar de plata al Estado. Hay que sacarse toda esa fantasía. El objetivo es que los compatriotas tengan la cama para internarse. La prioridad son los argentinos” y negó que haya xenofobia en la normativa, a la vez que remarcó que los extranjeros residentes en el país no están incluidos y reciben atención gratuita como las personas que tienen nacionalidad argentina.
Fuente: Infobae