El reconocido periodista jujeño, Carlos Santos Torres, comparte a continuación su columna semanal desde el Programa Necesitamos Saber que se emite cada miércoles en el aire de Canal 2 de Perico.
“Tramas”
Silencio el tango que cantaba Carlos Gardel decía “silencio en la noche/ ya todo está en calma/ el músculo duerme/ la ambición descansa”.
Y a veces uno quiere creer que la ambición descansa cuando duerme. Pero, parece que en este tiempo político donde ya hemos venido superando distintas etapas como superamos etapas en la vida, las superamos desde niños, jóvenes, estudiantes, adultos, adultos mayores y vamos pasando las distintas etapas siempre en pos de tener una buena calidad de vida y estar bien.
Quiero hacer esta comparación porque también hay etapas en la política que hemos venido pasando y los invito a repasar estos momentos.
Hemos pasado la etapa de libro de pases, como en el fútbol. Los jugadores de un club a otro se cruzan, algunos permanecen, otros van al exterior. Ese es el movimiento constante de jugadores. En la política hubo eso también cuando se comenzaron a armar las listas para participar de cada contienda que pasó porque tuvimos varias elecciones en este año. Entonces el celeste se vino al verde, el verde se fue al amarillo, el amarillo se fue al rojo y así fueron migrando, acomodándose como mejor les quedaba el color, la posición, la aspiración hasta ese momento.
Después estuvo la presentación de candidatos con sus desafíos, con su bagaje de ofrecimiento a la comunidad.
Luego vino la lucha por el cargo, es decir, el conseguir un cargo, tener el poder. Algunos, el cargo para cumplir con la sociedad, otros el cargo para tener el poder, el poder por el poder mismo.
En un cuarto momento, llegamos a los electos, los que fueron elegidos por el voto de la gente y quedaron los heridos, los que tras haber sido derrotados algunos habrán ido a su casa diciendo `la próximo será` y otros buscando posicionamiento dentro de lo que la sociedad política va ofreciendo, a lo mejor cediendo algunas posturas.
Así vamos pasando el tiempo. Unos por permanecer, otros por sobrevivir en el terreno humano, otros híper divididos, otros individualizados.
Todos con sus tramas, con sus armados.
Todo aquellos que se preparan para ganar una elección porque ambicionan, desean, tienen codicia, buscan lograr riquezas, poder, fama. Y codicia que es querer más de los necesario porque no se conforman, son insaciables. Y van por más.
Ahí entran estas tramas que se van tejiendo aquí, allá, más allá.
Parecida a la etapa del cambio o mutación, tras haber pasado una y otra y otra elección siguen probándose un taje que les ande bien pero hasta ahora ninguno queda cómodo. Porque quieren seguir como sea, cambiando de color, mutando. Se comparan con las orugas, en metamorfosis constante.
Buscan nuevas formas, propósitos, mejor mensaje par, conquistar, embelesar, atraer como el imam a los votantes.
En el orden nacional muchos quieren estar, y son de variado color, se acercan con más o menos confianza, avanzan, buscan formas de sacar tal vez a los que tienen buenas intenciones y permanecer por tener el poder constantemente.
Y se pasa la contienda pero ellos siguen en su intento de lograr sus objetivos con otros pasos, ilegales, de ´prepo´, tramposos, donde el individuo no cesa en su osadía, no cede en su codicia por el objetivo.
Nuevos tiempos queremos.
Queremos modos de vida saludables quienes seguimos en la vida cotidiana aunque ellos quieren ganar todo.
Hasta acá nos sostuvo la capacidad de resiliencia. Nosotros este tiempo nos hemos mantenido con la sabiduría que Dios nos dio, con las ansias de cambio y con una expectativa enorme. Con éxitos, otros no tantos, algunos con mas prioridades que otros.
Nos fuerza este tiempo a refundarnos. Dejar de lado suspicacias, recelos, desconfianza porque allí aparece la malicia, el prejuicio.
Este tiempo que se aproxima con la genialidad de la simpleza: el pesebre que seguramente se armará en cada uno de los hogares este mes de diciembre, donde la fe nos llevará a armar ese pesebre donde veremos tantas cuestiones que nos lleven a transitar las cosas de mejor manera, cargadas de fe.
Diciembre nos anuncia la Navidad, la unidad, construir puentes, tomar los desafíos que se nos presenten con positivismo, cambios, ternura.
Desaprendernos de algunas cosas, dejar de lado eso que nos hicieron en todo este tiempo.
Busquemos con madurez para seguir por el buen camino.
Termino con la letra de Carlos Gardel que contaba, se trataba de una viejita con cinco hijos en Francia que perdió a los cinco en la guerra y le devolvieron cinco medallas. Después de eso siguió luchando y escuchó el canto del arado, el canto de la siembra, el perfume de las nuevas plantas que daban alimento al mundo. Allí mencionaba que ´el músculo descansa pero la ambición no´. Allí es donde la ambición y las tramas del hombre por el poder no se terminan nunca.
Espero que esta navidad y este diciembre nos traigan cosas lindas y reflexionemos.
¿Lo pensamos?
