A menos de un mes, el Gobierno parece haberse construido su propio Pacto de Mayo. En menos de 24 horas, convocó a plenario de comisiones y logró dictaminar las 156 páginas y 232 artículos de la nueva ley Bases en la Cámara de Diputados. Privatizaciones, reforma laboral y facultades excepcionales son los puntos más relevantes que tratarán este lunes en el recinto. El presupuesto de universidades también está en la agenda.
A pesar de las tensiones que emergen en su ejercicio del poder, el oficialismo logró retener parte del apoyo que expresó discrepancias con su plan de gobierno en las últimas semanas. Además del consabido acompañamiento del PRO, La Libertad Avanza se respaldó en el ministro del Interior, Guillermo Francos, quien hizo de sus oficinas nodos de construcción de acuerdos, donde no ingresan la lógica caótica y confrontativa del paradigma libertario.
Así se garantizó los votos de Oscar Zago y su nuevo espacio, el MID; a los diputados que se rigen por la influencia de los gobernadores Santa Fe, Córdoba y Entre Ríos; a la bancada de Innovación Federal (que responden a los mandatarios de Salta, Río Negro y Misiones); y ratificó el apoyo del espacio Independencia, de tucumanos que rompieron con Unión por la Patria. Esos apoyos, que salpican en Hacemos Coalición Federal y el sector de la UCR que sigue respaldando la postura de Rodrigo de Loredo como presidente de bloque, son suficientes para que la ley Bases sea aprobada.
La resistencia llegaría unánime desde Unión por la Patria, el Frente de Izquierda y de Por Santa Cruz. También se sumarían autónomos de Hacemos Coalición Federal (los socialistas santafesinos y Natalia de la Sota) y los más críticos radicales, que le achacan a miembros de su partido que el Gobierno no respetó el proyecto de reforma laboral que habían acordado con ellos semanas antes y que ya se discutía en comisiones. Sin embargo, no hay suma que alcance: si no se tuercen voluntades y a menos que acontezcan los imprevistos que se han vuelto recurrentes en la actual gestión, el martes después de una extenso debate la ley Bases obtendrá media sanción.
DNU: Unión por la Patria pidió sesión para derogarlo
Con un documento firmado por la totalidad del bloque de diputados, Unión por la Patria convocó para el martes a una sesión especial para tratar el DNU 70/2023 anunciado en diciembre por cadena nacional por Javier Milei y que, desde ese mes, entró vigencia en las legislaciones de alquileres, prepagas, tarjeta de créditos y abastecimiento de góndolas, entre otros aspectos. El decreto ya obtuvo el rechazo del Senado pero precisa de la votación en la Cámara Baja para consolidar su derogación.
En la noche del viernes, la presidencia de la Cámara notificó que el pedido de sesión será reprogramado para no interrumpir el debate de la ley Bases. El presidente del bloque peronista, Germán Martínez, denunció en redes sociales que «Menem quiere impedir la convocatoria invocando un mensaje que mandó dos horas después. Insólito e ilegal».
“Se va esperar el trámite previsto respetando el actuar de la Comisión Bicameral”, señalan desde el radicalismo, una bancada fundamental si Unión por la Patria quiere evitar volver a encontrarse con una sesión caída por la falta de quórum.
La Comisión Bicameral de Trámite Legislativo se reunió, efectivamente, el pasado jueves. En ese encuentro, deliberó al respecto de 69 decretos en orden cronológico (67 de Alberto Fernández, 2 de Javier Milei, ninguno de ellos el 70/2023), cuyos plazos están vencidos, dado que por reglamentación cuentan hasta diez días para dictaminar luego de la la promulgación del DNU. Una vez que normalice su situación la comisión puede tener incidencia, pero sus medidas no modificarán la posición de la Cámara Baja, que deja pasar desde el 15 de marzo la posibilidad de tratar el decreto presidencial.
Presupuesto universitario se discute con todos los bloques
La última semana, el presupuesto de las universidades nacionales motorizó una movilización masiva y una posterior sesión especial en la Cámara de Diputados, que no se concretó por falta de quórum. Posteriormente, los dos bloques de la oposición acuerdista con mayor volumen, Hacemos Coalición Federal y la Unión Cívica Radical, pidieron que los proyectos vinculados al financiamiento de la educación pública se traten en comisión el próximo jueves. ¿La sorpresa? La firma de dos diputados que no dieron quórum, como Miguel Pichetto y Rodrigo de Loredo.
«Vamos a tratar en serio el financiamiento universitario», escribió en sus redes sociales De Loredo. La respuesta fue afirmativa por parte de la Unión por la Patria y el Frente de Izquierda, los dos bloques que sí fueron a la sesión especial de forma unánime, aunque sumarán una condición: incluir mayores reformas. Romina del Plá (FIT), por caso, pidió la triplicación del presupuesto educativo y la declaración de la emergencia presupuestaria para obras sociales universitarias.
«Le exigimos al presidente de la comisión que incluyan los demás proyectos que tienen afinidad temática porque la convocatoria se hizo con un solo proyecto, así que con la firma de varios diputados pedimos que se incorpore Fondo Nacional de Incentivo Docente”, sumó Itai Hagman (Unión por la Patria) para Ámbito, al que se le añadió el testimonio de Blanca Osuna: “Son temas que tienen que ver con el financiamiento educativo, porque es necesario tener miradas integrales tanto para las universidades como para niveles obligatorio del sistema cuyos docentes están afectados por la falta de pago del FONID y del Fondo Compensador Salarial”. El dictamen, hasta que llegue a recinto, promete debates.
Fuente: Ámbito
